En el marco de sus compromisos climáticos, México busca impulsar la transición hacia energías limpias en 2024. Sin embargo, el aumento propuesto en el gasto para esta causa es modesto, a pesar de las crecientes preocupaciones sobre el cambio climático.
Según el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2024 (PPEF), el presupuesto destinado a la Estrategia de Transición para Promover el uso de Tecnologías y Combustibles más Limpios se establece en 10,647.1 millones de pesos, lo que representa un aumento del 3.4% en comparación con el PPEF 2023 (10,288.2 millones).
De este presupuesto, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) acapara la mayor parte con 10,252.6 millones de pesos, es decir, el 96.2% del total. Estos fondos se asignan a través de los Proyectos de Inversión de Infraestructura Productiva con Registro Diferido en el Gasto Público (Pidiregas), en su mayoría impulsados por el sector privado.
La CFE tiene planes de construir y/o rehabilitar centrales hidroeléctricas, plantas de ciclo combinado y una línea de transmisión, lo que se traducirá en la adición de 3,824.68 megavatios al Sistema Eléctrico Nacional, principalmente en los estados de Chiapas, México, Hidalgo, Morelos, Sinaloa y Sonora.
El restante de 404.5 millones de pesos de la Estrategia se distribuirá entre otras dependencias y entidades de la Administración Pública Federal con el objetivo de promover acciones y programas orientados al ahorro de energía y la transición energética.
Además, Petróleos Mexicanos (Pemex) asignará 20 millones de pesos para mejorar sus procesos productivos y hacerlos más amigables con el medio ambiente.
Por último, el Fondo para la Transición Energética y el Aprovechamiento Sustentable de la Energía, bajo la Secretaría de Energía, destinará 286.2 millones de pesos para fomentar la utilización, desarrollo e inversión en energías renovables y la eficiencia energética.
