Es común después de la ruptura, que tanto el varón como la mujer sientan tristeza, pero como ya lo sabemos, la asimilación con el tiempo es muy diferente, por lo que estos psicólogos explican por que el varón constantemente busque volver o no supera la relación.
Por lo que psicólogos de la Universidad de Binghampton, tras estudio, afirman que las mujeres sufren mucho después pero que los hombres nunca lo superan al 100 por ciento, por lo que mencionan estas 4 principales razones.
1. No hablan
Los hombres no suelen expresar sus emociones verbalmente, sino a través de la acción, lo que les lleva, como dice Mila Cahue, doctora en psicología y autora de los libros Amor del bueno (Ed. JdeJ) y El cerebro feliz (Ed. Paidós), a la gestión de las emociones más solitaria. “Las mujeres suelen manejar el estrés, a cualquier nivel, primero al hablar, y esto supone tener interlocutores y, por lo tanto, redes de apoyo. Los hombres suelen manejarlo al actuar: salen a correr, sacan al perro o jugar videojuegos, y esto supone la gestión más solitaria.
2. Me puedes dejar por otro, pero no por nadie
Asegura la especialista Mila Cahue, en las situaciones de separación los hombres llevan mejor que los dejen por otro, a que los dejen por nadie o por el «ya no te quiero». “En el primer caso, es competición en la que, simplemente, perdieron. En el segundo caso (que no te dejen por nadie), el efecto es devastador y para muchos hombres, incomprensible.
3. Ellos están mucho más cómodos en pareja
Algunos estudios a nivel internacional, como los que repasa la Harvard Medical School, indican que la salud de los hombres casados es mucho mejor que la de aquellos que permanecen solteros, o los divorciados.
4. La química del cerebro es diferente
También, algunas investigaciones apuntan que en situaciones críticas como la separación, el cerebro masculino llega a generar sustancias químicas no beneficiosas. Al menos, en el caso de los ratones. Los investigadores Larry J. Young y Brian Alexander vieron en sus estudios con roedores cómo los machos separados de sus parejas producían gran cantidad de corticosterona, hormona que tiene relación al estrés.