Decir que han transcurrido 10 años desde Youth Novels se dice fácil. Cuando lo decimos, es más o menos como si estuviéramos dando un vistazo al pasado, como si revisitáramos aquellos bellos tiempos en los que la música comenzaba a compartirse a través de plataformas digitales; cuando comenzábamos a usar redes sociales y a través de ellas descubríamos una nueva rola.
Esto era todo un logro y así, a través de estos mismos medios, fue como se escucharon las primeras canciones de Lykke Li, una artista sueca cuya música cambió la escena musical contemporánea tanto de este país como de Reino Unido y Estados Unidos, que decidió experimentar con una serie de géneros, que logró innovar y que así como muchos otros artistas de ese tiempo, creó un disco que se quedó grabado en nuestras mentes por siempre.
Youth Novels, más que ser un disco debut creado a partir de la ruptura de un noviazgo de tres años, es la representación de ese amor de juventud, ilógico, inmaduro, de esos inicios dentro de la música indie, de esa etapa en la vida que jamás volverá, pero que por alguna extraña razón, cuando me encuentro en ciertas situaciones de la vida —como estar enamorada otra vez—, me hacen esbozar una sonrisa y me hacen dedicar esa canción a ese ser amado. Me hace mirar al pasado y darme cuenta que todo es pasajero, que al final de cuentas solo hay dos cosas importantes en la vida: la música y el amor.
Escucha “Hurts to Liv” de Lykke Li