Desde los cimientos del proyecto, era claro que Disney pretendía conquistar la taquilla de aquel país e incluso redimirse por la controversia que giró alrededor de la película original. Sin embargo (oh, cruel destino) la novedosa reinvención de Mulán tampoco ha eludido la polémica y ello aparentemente se traducirá en una completa indiferencia por parte de los medios periodísticos en China.
De acuerdo a nuevos reportes, autoridades chinas han ordenado a sus mayores medios de comunicación que desistan de cubrir el estreno de Mulán. Si bien estas empresas no recibieron una justificación oficial, ya han emergido especulaciones acerca de los motivos que cobijan semejante prohibición.
Recordemos que, con el pasado lanzamiento de Mulán a través de la plataforma Disney Plus, fue puesto en evidencia que parte de su filmación se llevó a cabo en el territorio autónomo de Sinkiang. En esta zona, según han señalado múltiples gobiernos y organizaciones, China ha instalado a miembros de la etnia musulmana uigur dentro de «campos de reeducación», los cuales no serían más que prisiones plagadas de abuso, tortura y adoctrinamiento.
Así pues, los evidenciados vínculos de la producción de Mulán con la Dirección Municipal de Seguridad Pública en Turpan —supuesta responsable de vigilar aquellos campos de reeducación—, fueron vistos con muy malos ojos, de modo particular en Estados Unidos.