Todo comenzó cuando el árbitro portugués Pedro Proença, juez del partido entre las selecciones de Holanda y México en el Mundial de Brasil 2014, marcó un controvertido penal cometido contra el jugador Arjen Robben.
Los mexicanos reclamaron que la falta nunca existió y que el futbolista holandés se había tirado a la cancha.
Pero la sanción fue cobrada por el mismo Robben y con el gol anotado, México perdió la oportunidad de pasar a semifinales. Era el 29 de junio de ese año.
En el restaurante donde veía el encuentro en Morelia, Michoacán, José Luis Mercado Ortega se levantó de su silla y soltó una andanada de insultos.
«Estaba muy enojado, mi familia me tuvo que decir ‘cálmate, estamos en un lugar público'», le cuenta a BBC Mundo.
Al día siguiente, el joven de entonces 20 años criticó en Twitter la polémica decisión arbitral con la etiqueta que entonces encabezaba la indignación de los aficionados mexicanos: #NoEraPenal.
Durante más de tres años hizo lo mismo. Diariamente, desde su cuenta @Josesomor26 envió mensajes a las selecciones de Holanda y México, la FIFA y a Arjen Robben para recordarles el polémico episodio.
Hace unos días el equipo holandés quedó fuera de la competencia por participar en el Mundial de Rusia 2018.
¿Suerte, karma, casualidad? Quizá todo junto, dice José Luis, porque a toda acción hay siempre una reacción. Quiénes serán cabezas de serie y cómo quedarán los bombos del sorteo para el Mundial de Rusia 2018
Pero de lo que no hay duda es que para el estudiante, hoy de 23 años de edad, la eliminación holandesa fue un momento de dulce venganza.
«Sentí mucha satisfacción, se hizo justicia de lo que pasó el mundial pasado. Creo que lo merecían», afirma.
Hace tres años y 105 días desahogó su enojo en Twitter. Ahora compartió su alegría: publicó una foto donde Arjen Robben aparece desconcertado.
Junto a él, en inglés, las frases: «Mejor suerte a la próxima» y «Espero verlos en Qatar», en referencia a la sede del Mundial de 2022.
Y encima del jugador la frase de la venganza: #NoEraPenal.